Es usual que en un sepelio se escuche esta frase: “en vida hermano, en vida” y se convierte en el decir de algunas personas que están haciendo ese “acompañamiento” a una familia en el último adiós a su ser querido.  
 

Esto nos da pie para aclarar que es común que una persona que está vivenciando su proceso de duelo, exprese sus sentimientos y emociones de una u otra forma. 

No quiere decir que esté haciendo como se dice coloquialmente “alharaca” o llamando la atención como muchas personas lo asumen. No se deben juzgar estas conductas, en cambio, se debe reconocer que los rituales y costumbres hacen parte del duelo; de hecho, este es un fenómeno que se conoce desde la antigüedad. 

Esas manifestaciones, junto con las preferencias para la celebración de las exequias de su familiar, tales como un acompañamiento musical, arreglos florales especiales, entre otros detalles, favorecen la adaptación y reacomodación de la persona y su familia a la vida sin su ser querido.  

La invitación es a entenderlo como una parte normal e inicial del duelo y una manifestación social y cultural. Se trata de acoger al amigo, familiar o allegado sin estigmatizaciones o señalamientos, acogerlo con amor y sentimiento.  

PSI. Hernán Rodríguez Sánchez 

Asesor familiar de duelo – Parque Cementerio – Cali.